Se trata de Carlos Alarcón y Melissa González, alumnos de biología marina, quienes resultaron heridos con lacrimógenas el pasado martes 10 de mayo, tras las movilizaciones en contra de Hidroaysén y los enfrentamientos registrados en el frontis de la casa de estudios superiores.
Alarcón narró como sucedieron los hechos que le dejaron con un serio problema en uno de sus ojos, producto del impacto de una de las bombas de gas.
" Al principio carabineros comenzó a lanzar bombas al aire y después fueron al cuerpo a quemarropa, luego comienzan de manera más intensa y fue ahí cuando me llegó una en mi rostro. Creí que había perdido el ojo, unos compañeros me ayudaron y llevaron al hospital"
El estudiante permanece internado en el hospital regional de Valdivia con trauma ocular grave en el ojo derecho, lo que podría generarle complicaciones en su visión a causa de una posible destrucción de retina.
En tanto Melissa González, contó que aprovechaba un momento de tranquilidad para abandonar la universidad cuando recibió una lacrimógena en una de sus mejillas.
"Encontré en un momento que la situación estaba más pacífica y salgo como hacia el centro y siento que me llega en la mejilla izquierda una bomba directo a mi mandíbula. Fue disparada a menos de diez metros de distancia y provenía de carabineros, porque a mi izquierda estaban ellos", dijo.
González, sentenció que a raíz del impacto resultó con una cicatriz de 5 puntos en el exterior y 3 en el interior, además de una fractura en la mandíbula izquierda, que le significó insertarle una placa de titanio, debiendo extraerle una muela.
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